Las lluvias aisladas que llegaron durante las primeras horas de este Viernes 25 de Julio al Área Metropolitana de Buenos Aires marcaron el inicio de un cambio de tiempo que se consolidará hacia la noche, con la llegada de un frente frío y condiciones típicas de Sudestada que dominarán el fin de semana sobre el estuario del Río de la Plata y zonas cercanas.
Durante la mañana, el cielo se presentó mayormente cubierto, con precipitaciones débiles, aisladas y sin acumulados significativos. Estas lluvias fueron acompañadas por vientos variables, que comenzaron a rotar del norte hacia el oeste con el correr del día. Hacia la tarde, aunque el tiempo se mantuvo algo inestable, la tendencia fue a una mejora gradual, con una temperatura máxima que apenas rozó los 15 °C en la Ciudad de Buenos Aires y alrededores.
Entre las 21 y las 24 horas, está previsto que el frente frío ingrese con vientos del sur que llegarán con ráfagas moderadas, sin lluvias en ese periodo pero con un descenso térmico más marcado y el comienzo de una intensificación del viento que marcará el tono del sábado y domingo.
La configuración atmosférica del fin de semana responde a un patrón sinóptico característico: altas presiones que avanzan desde el norte de la Patagonia y un centro de bajas presiones profundizándose sobre el sur de Brasil y el norte del Litoral. Esta disposición genera una fuerte circulación de viento del sudeste, típica de la Sudestada, que impactará con fuerza no solo en el AMBA, sino también en buena parte del centro de la Argentina.
Desde la madrugada del sábado, el viento sudeste se afianzará con intensidades constantes entre 20 y 30 km/h, y ráfagas que en algunos momentos alcanzarán los 40 a 50 km/h, especialmente en zonas costeras como La Boca, Costanera Sur, San Fernando, Avellaneda y Quilmes. A pesar de la presencia de esta circulación intensa, el fenómeno se presentará como una Sudestada seca, ya que la probabilidad de lluvias será muy baja tanto el sábado como el domingo.
Lo más desagradable del fin de semana no serán las lluvias, sino la combinación de viento fuerte, cielo gris y frío intenso. Las temperaturas mínimas se mantendrán entre 6 y 8 °C, mientras que las máximas no superarán los 11 a 13 °C, y la sensación térmica podría ser notablemente inferior por efecto del viento constante.
Otro factor importante será la crecida del Río de la Plata, habitual en contextos de Sudestada. A partir de la madrugada del sábado, se espera una suba del nivel del agua en el estuario, con una pleamar leve hacia el mediodía en los puertos del AMBA. Las mareas más altas se darán al comienzo de la noche del sábado y en las primeras horas del domingo, con niveles que podrían superar los 2,50 metros, aunque sin riesgo elevado de anegamientos, ya que no se prevé una crecida de gran magnitud.
Todo esto en pleno receso de vacaciones de invierno, con un ambiente que invitará más al abrigo que al paseo al aire libre, en una Ciudad de Buenos Aires que tendrá un fin de semana marcado por el frío, el viento y el cielo cerrado.